viernes, 7 de octubre de 2011

Capitulo 1. Catástrofe en Liverpool.

-DANNIE! DANNIE! SON LAS 7:20 DE LA MAÑANA!!-Gritó mi madre desde la sala. Una luz demasiado brillante iluminaba mi rostro, el peso de mis parpados apenas si me permitía abrir mis ojos, era mi primer dia de clases. 

-7:20?- Grite alteradamente, pues yo iba a entrar a clases a las 8:00 de la mañana. Me levantè de la cama y traté de arreglarme lo mas rápido posible, mi mama me dio 1 libra para mi almuerzo, ahora tenía que cruzar volando esa maldita puerta; cuando lo hize, corrí hacia la parada de autobuses sin importarme que traía falda, ahí estaba el autobús que tenía que abordar, corrí y apenas lo alcanze. Pague mi pasaje y subí las escaleras.
-¡BUENOS DIAS DANNIE!- escuché la voz de un chico enano y con cara de estúpido, calro y con una maldita caja de música a su lado. El me ofreció un lugar a un lado suyo pero yo me senté detrás de el, no quería aguantarlo todo el camino.

-George, a que horas…- dije un poco cortante, sabía que era un mal dia para empezar.
-Hoy me levante demasiado tarde, tanto que hasta el autobús ya se había ido- dijo George un poco preocupado. –Si mi mamá se entera de que voy tarde, me matará-
-Uf. MALDITO DIA!- grité y me recarge en el tubo que estaba enfrente de mi.
-Que pasa Dannie, ¿no te alegras al verme?- decía George un poco preocupado por mi actitud
- La verdad, no. ERES UN FASTIDIO HARRISON! ¡Solo porque nuestras madres son hermanas, soy capaz de hablarte !- le grité a George , ME TENÍA FASTIDIADA, y este solo se sentó bien, abrazo su caja de música y el nene comenzó a llorar. Yo solo lo veía, y me dio tristeza su semblante devastado y decepcionado. Realmente había estado mal, herí sus sentimientos, pero no puede ser, habían sido 4 años que ya no lo veía, ¿como se puede acordar de mí el idiota? ERA IRONICO.
Ya en era hora de bajarme, solo faltaban 3 minutos para las 8:00, realmente, no había estado tan mal. Me levanté y George tomó de mi mano, su rostro estaba hinchado de tanto llorar, sus mejillas estaban rojas y sus ojos estaban irritados. Nunca pensé que se iba a poner tan mal, el pusó un papel sobre mi mano. –QUE TE VALLA BIEN EN TU PRIMER DIA DE CLASES EN LIVERPOOL, AUNQUE ME HAYAS DECEPCIONADO TANTO-. Yo solo bajé el autobús con rapidez, y corri en dirección al colegio. No era una secundaria tan grande, pero se veía un poco alegre.
-SEÑORITA DANNIELA HALL FRENCH- escuché una voz, que gritaba mi nombre y entre al salón.
-TARDE PERO SIN SUEÑO MAESTRA- Grité un poco agitada, la maestra mostraba una edad mayor y se veía algo delgada, pero gracias a la estúpida toga que utilizan todos los maestros, se veía gorda.
-Llegó algo tarde señorita Hall, pero por ser una chica de nuevo ingreso, puede sentarse ahí.- señaló la maestra un lugar al rincón, junto a un chico de lentes cuadrados que se veía muy inteligente, parece que mi día no iba a ser una catástrofe del todo.
-Buenos días- me limité a decir al chico de lentes, sabía que me serviría, el podría crear mis tareas… Aunque no era demasiado guapo, podría utilizarlo.
-Buenos días, eres la chica nueva ¿cierto?- su voz era linda, tan solo eso, era muy serio en lo que hacia, tal vez ni se percato de mi presencia, ya que estaba demasiado concentrado en aquellos problemas del trinomio cuadrado perfecto de algebra. Aparte de que a ese punto del salon no se veía ni escuchaba mucho lo que decia la maestra.
-Si, soy la nueva- dije un tanto cortante, en ese momento el levanto su mirada y se rió un poco. –¿Qué pasó? ¿acaso tengo cara de payaso?- le dije furiosa
-No Dannie, esque no has visto tu cabello- dijo el chico de lentes dejando sus problemas de algebra y se acercó a mi acariciando mi cabello.
-¿QUE TE PASA?- le dije a aquel chico
- Solo acomodo, LISTO!, quedaste perfecta- ¿en realidad estaba acomodando mi cabello?, el veía mis ojos azules con cierta ternura, mientras yo me perdía en su mirada que se cubría por esas dos gruesas capas de cristal, esos dos ojos color café… color avellana. ¿COLOR AVELLANA?
-¿Eres mi vecino?- pregunté asombrada, recordando su rostro de bebé, y sus ojos avellana.
-Soy James Paul, ¿no recuerdas mi nombre?- dijo entre risas quitándose sus gafas.
-De hecho, nunca lo dijiste- le dije irónicamente, y se quedó serio, cosa que me dio bastante risa.
-SEÑORITA HALL Y JOVEN MCCARTNEY, ¿PUEDEN CALLARSE?, PAUL! NO DISTRAIGAS A NUESTRA NUEVA COMPAÑERA- lo ultimo lo dijo de forma burlona haciendo que todo el salón dijera un incomodo: uuuuiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!... Paul se sonrojó demasiado, y yo me reí por eso, y fue cuando saque mi cuaderno y un estuche metálico  que yo había decorado con pintura acrílica.
Cuando me puse mis lentes, todos me voltearon a ver, ¿acaso me veía horrenda?
-UNOS LENTES DE AUMENTO RAY-BAN IGUALES QUE BUDDY HOLLY- gritó una chica que estaba enfrente de mi.
-DIOS! DONDE LOS CONSEGUISTE! SON ORIGINALES!- todos decían a la par lo mismo… -NO SON COMO LOS LENTES PIRATAS DE PAUL- todo eso, mientras James se me quedaba viendo con tristeza.
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-NO PUEDE SER DANNIE-. Repetía y repetía Paul,-¿ donde conseguiste tus lentes?- yo solo lo veía con tristeza y me sentía mal, yo solo quise ser amable con el. Caminabamos por la escuela, era receso, mas o menos a las 10:40am
-Los compré en Londres- Paul dejó de alegar para gritar: -¿ERES DE LONDRES?- estaba asombrado, parece que ni un Londinense tocaba Liverpool y menos esa escuela.
-No, soy de Cambridge- dije con cierta humildad y a tono cortante, el solo estaba algo cabizbajo. –No estes asi, tus lentes tambien están muy geniales, es mas- Le respondí de manera muy amable pues el había sido muy bueno conmigo, me detuve y busque en mi bolsa, saque ese estuche metalico decorado por mi y se lo entregue a Paul.
-¿QUE ES ESTO?¿TUS LENTES?- el solo me veía con cara de ¿son para mi? y yo solo asentí. -NO PUEDE SER- casi lloraba de la emoción, y me abrazo. –GRACIAS DANNIELA!- su sonrisa era mas que suficiente para agradecerme.
Entramos a clases, y nos tuvimos que separar, a mi me tocaba estar en “Estructuración del Arte” mientras el estaba en “Repaso a la historia de la música clásica y Lección de notas musicales” con el maestro Rupert Manchester. El grupo de dibujo, escultura y pintura se componía por 3 chicas y 5 chicos; Layla Joel, era norteamericana, alta de ojos verdes y cabello oscuro; Rachell mcDough, era de Penny Lane, su padre era el peluquero del pequeño poblado y Dot Rhone, en realidad, esa chiquilla no me traía buena espina, se la pasaba platicando de Paul McCartney, su tema de conversación: Paul McCartney, casi puedo jurar que cagaba Paul McCartney. 

Los chicos eran atractivos y lindos, eran Carl Parson, que era del condado de Blackpool , Peter mcDough, que era el gemelo de Rachell, se veían muy buenas personas, junto con Gerard Lou, un chico alto palido muy apuesto, tenía una cara demasiado fina y muy bonita, admito que el era muy listo, pero no más que Denisse Pearson, que era un chico pelirojo y pecoso, algo problemático… Este era mi maldito equipo de trabajo, al mando de la maestra Gabrielle Bann.
Eran aproximadamente las 3 de la tarde cuando salimos. Paul me esperaba en la puerta, parece que me acompañaría, traía consigo una caja de música igual que la de Harrison
-¿y esa caja de música?- pregunte con fastidio, todos los chicos tenían de esas cosasy la de el, por lo visto era una Zenith, yo sabía de guitarras, mas no sabia tocarlas.
-JAJAJAJA. ¿TE REFIERES A MI GUITARRA?- si el se rió de mi, y yo estaba un poco fastidiada, no había sido un dia muy bueno.
Regresamos a casa, paul iba tocando guitarra y me enseñaba un poco, por ahora solo me sabía 3 acordes: FA, SOL y RE. Llegamos a nuestras casas y fue cuando nos separaron nuestros jardines.
Entre a mi casa y me dispuse a seguir un camino hacia mi cuarto, pero me detuvo algo: UNA GUITARRA ACUSTICA GIBSON. Igual que la de Elvis, Paul me mataría si la viera, pero claro que esa no se la daría, si le di mis lentes, era porque tengo dos pares de ellos iguales en mis cosas personales.
-Espero que te guste-. Escuche la voz ronca y gruesa de mi madre. - George me ayudo a escogerla-.

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